martes, 3 de marzo de 2015

La Paz perfecta



Había  una vez un rey que ofreció un gran premio a aquel artista que pudiera captar en una pintura la paz perfecta. 

Muchos artistas intentaron. El rey observo y admiro todas las pinturas, pero solamente hubo dos que a él realmente le gustaron y tuvo que escoger entre ellas. 

La primera era un lago muy tranquilo. Este lago era un espejo perfecto, donde se reflejaban unas plácidas montañas que lo rodeaban. Sobre estas se encontraba un cielo muy azul con tenues nubes blancas. Todos los que miraron esta pintura pensaron que esta reflejaba la paz perfecta. 

La segunda pintura también tenía montañas, pero estas eran escabrosas y descubiertas. Sobre ellas había un cielo furioso del cual caía un impetuoso aguacero con rayos y truenos. Montaña abajo parecía retumbar un espumoso torrente de agua. Todo esto no revelaba lo pacífico en lo más mínimo. Pero cuando el rey observo cuidadosamente, miro tras la cascada un arbusto que crecía en una grieta de la roca. En este arbusto se encontraba un nido. Allí, en medio del rugir de la violenta caída del agua, estaba sentado plácidamente un pajarito… “la paz perfecta”. 

Sin dudarlo el rey escogió esta pintura y explico: 

“Paz no significa estar en un lugar sin ruido, sin problemas, sin trabajo duro o sin dolor. Paz significa que a pesar de estar en medio de esas cosas, permanezcamos calmados dentro de nuestro corazón. Este es el verdadero significado de la paz”.

Autor desconocido.

Feliz día, paz y amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Si te ha gustado esta información deja tu comentario e incluso comparte un enlace en dónde obtener más información al respecto.
Dale a Me Gusta (Like)