jueves, 30 de abril de 2015

Donación de Sangre

Hace muchos años, cuando trabajaba como voluntario en un Hospital, conocí a una niña que sufría una extraña enfermedad. 

La única oportunidad de recuperarse aparentemente era una transfusión de sangre de su hermano de 5 años, quién había sobrevivido milagrosamente a la misma enfermedad y había desarrollado los anticuerpos necesarios para combatirla.

El medico explicó la situación al hermano de la pequeña, y le preguntó si estaría dispuesto a dar sangre a su hermana. Lo vi dudar por un momento antes de hacer un gran suspiro y decir:

- Sí, lo haré, si esto la salva.

Mientras la transfusión continuaba, él estaba estirado en una cama junto a la de su hermana, y sonreía mientras nosotros los asistíamos y veía devolver el color a las mejillas de la niña. 

En un determinado momento la cara del niño se puso pálida y su sonrisa desapareció. Miró el doctor y le preguntó con voz temblorosa:

- ¿A qué hora empezaré a morirme?

Siendo sólo un niño, no había comprendido la explicación del doctor: Él pensaba que le daría toda su sangre a su hermana, y entonces moriría.

Que tengas un hermoso día, paz y amor.


El Anillo


-Vengo, maestro, porque me siento tan poca cosa que no tengo fuerzas para hacer nada. 

Me dicen que no sirvo, que no hago nada bien, que soy torpe y bastante tonto.

¿Cómo puedo mejorar?

¿Qué puedo hacer para que me valoren más?

El maestro sin mirarlo, le dijo: 

-Cuánto lo siento muchacho, no puedo ayudarte debo resolver primero mi propio problema. Quizás después... 

- y haciendo una pausa agregó:

- Si quisieras ayudarme tú a mí, yo podría resolver este problema con más rapidez y después tal vez te pueda ayudar.

- E... encantado, maestro, titubeó el joven, pero sintió que otra vez era desvalorizado, y sus necesidades postergadas.

- Bien, asintió el maestro. 
Se quitó un anillo que llevaba en el dedo pequeño y dándoselo al muchacho, agregó


- Toma el caballo que está allí afuera y cabalga hasta el mercado. Debo vender este anillo porque tengo que pagar una deuda. Es necesario que obtengas por él la mayor suma posible, pero no aceptes menos de una moneda de oro. Ve y regresa con esa moneda lo más rápido que puedas.

El joven tomó el anillo y partió. Apenas llegó empezó a ofrecer el anillo a los mercaderes.

Estos lo miraban con algún interés, hasta que el joven decía lo que pretendía por el anillo. 

Cuando el joven mencionaba la moneda de oro, algunos reían, otros le daban vuelta la cara y sólo un viejito fue tan amable como para tomarse la molestia de explicarle que una moneda de oro era muy valiosa para entregarla a cambio de un anillo.

En afán de ayudar, alguien le ofreció una moneda de plata y un cacharro de cobre, pero el joven tenía instrucciones de no aceptar menos de una moneda de oro y rechazó la oferta.

Después de ofrecer su joya a toda persona que se cruzaba en el mercado - más de cien personas - y abatido por su fracaso, montó su caballo y regresó. 

Cuánto hubiera deseado el joven tener él mismo esa moneda de oro. Podría entonces habérsela entregado él mismo al maestro para liberarlo de su preocupación y recibir entonces su consejo y ayuda. Entró en la habitación.

- Maestro - dijo


- lo siento, no se puede conseguir lo que me pediste. Quizás pudiera conseguir dos o tres monedas de plata, pero no creo que yo pueda engañar a nadie respecto del verdadero valor del anillo.

- Qué importante lo que dijiste, joven amigo - contestó sonriente el maestro.

- Debemos saber primero el verdadero valor del anillo. 

Vuelve a montar y vete al joyero. ¿Quién mejor que él para saberlo? 

Dile que quisieras vender el anillo y pregúntale cuánto te da por él. 

Pero no importa lo que ofrezca, no se lo vendas. Vuelve aquí con mi anillo.

El joven volvió a cabalgar. El joyero examinó el anillo a la luz del candil con su lupa, lo pesó y luego le dijo: 

- Dile al maestro, muchacho, que si lo quiere vender ya, no puedo darle más que 58 monedas de oro por su anillo.

- 58 monedas!!! Exclamó el joven.

- Sí, replicó el joyero - yo sé que con tiempo podríamos obtener por él cerca de 70 monedas, pero no sé... si la venta es urgente...

El joven corrió emocionado a la casa del maestro a contarle lo sucedido.

- Siéntate - dijo el maestro después de escucharlo.


- Tú eres como este anillo: una joya, valiosa y única. Y como tal, sólo puede valorarte verdaderamente un experto. 

¿Qué haces por la vida pretendiendo que cualquiera descubra tu verdadero valor? Y diciendo esto, volvio a su trabajo.


Autor:Jorge Bucay

La Moringa

La planta Moringa (Moringa Oleifera), es una de las más beneficiosas se conoce como el árbol de la vida por sus beneficios en el cuerpo humano, existe 13 especies dentro de su género, es originaria del norte de África y de la India, algunas especies se encuentran en Nicaragua, Brasil, España, Venezuela, etc.

Los beneficios de la Moringa son diversos, todas las partes de la planta son comestibles, desde su raíz hasta las semillas de su fruta.

Las hojas de la Moringa poseen una gran cantidad de propiedades debido a sus proteínas; minerales como hierro, fósforo, potasio, calcio y ácidos grasos esenciales; vitaminas A, C y parte del complejo B.

Según estudios realizados las hojas de la Moringa poseen:

-     18 Aminoácidos.

-     Más Potasio que los plátanos, el cual auxilia la regulación del balance del agua en la sangre y en los tejidos del cuerpo. Ayuda en el crecimiento normal del cuerpo en el desarrollo de los músculos.

-     Vitamina C, su contenido es superior al de Naranja. Éste contribuye a alejar los resfriados y la gripe.

-     Vitamina A, más que las zanahorias.

-     17 veces más Calcio que la Leche, éste es uno de los minerales más importantes para el crecimiento, el mantenimiento y la reproducción del cuerpo. La coagulación de la sangre, la transmisión de los impulsos de los nervios, contracción y relajación de los músculos, latido normal del corazón, estimulación de la secreción de hormonas y activación de la reacción de las enzimas. Reconstruye huesos frágiles

-     23 veces más Hierro que las Espinacas, el cual ayuda en la formación de hemoglobina y mioglobina, los cuales llevan el oxígeno a la sangre y los músculos. Mejorar la agilidad mental ya que aumenta el abastecimiento del oxígeno hacia el cerebro.

-     46 antioxidantes, éstos proporcionan los átomos libres que el cuerpo necesita y reducen el efecto de los Radicales Libres. Los antioxidantes ayudan a la prevención de formaciones malignas.

Una pequeña cantidad de las hojas de la Moringa, aportan el 23% del valor diario recomendado de consumo de vitamina A y hasta el 18% de vitamina C. 

Las hojas de la Moringa se pueden ingerir crudas puesto que pueden ser tratadas como vegetales, convirtiéndose así en un ingrediente muy nutritivo en ensaladas.

Las hojas preparadas como cataplasma se pueden colocar sobre las sienes para mejorar los dolores de cabeza, así como en daños en la piel. Posee propiedades analgésicas.

El extracto de hoja de Moringa es eficaz para controlar el crecimiento de los hongos en el organismo, ya que contiene gran cantidad de Pterygospermin, tiene una gran acción anti-fúngica. Este mismo componente ayuda a inhiben varias bacterias patógenas tales como el Escherichia coli, Staphylococcus aureus, etc.

Las raíces de la Moringa son amargas, se muelen para hacer infusiones como estimulante para epilépticos, como diurético, y para enfermos del pulmón como expectorante. La raíz puede ser utilizada en sopas y jugos. Utilizada sobre la piel actúa como desinflamante.

La raíz se utiliza también para preparar aceite, su uso es externo contra afecciones de la piel. Se utiliza contra picaduras de insectos, para el pie de atleta, contra la Caspa, para eliminar verrugas, y contra la gingivitis (encías inflamadas).

La raíz de moringa no debe ingerirse ya que puede contener sustancias tóxicas. En algunas bibliografías indica su consumo, es caso de hacerlo debe ser mínima la cantidad y en periodos esparcidos.

Con la flor de la Moringa se preparan tés utilizados en resfriados, y para mejorar el sueño.

La Moringa es excelente contra el estreñimiento crónico.

Las semillas de la Moringa se sacan de la vaina, se pueden ingerir curdas o tostadas. Los granos de semilla de Moringa tienen muchas propiedades que se asemejan mucho a la efedrina, sustancia que se utiliza para el tratamiento del asma. La Moringa relaja los bronquiolos, y disminuye la gravedad de los síntomas del asma mejorando las funciones respiratorias.


La Moringa está contraindica para as mujeres embarazadas o lactando no deben utilizar moringa, ya que podría producir contracciones uterinas y aumentar el riesgo de aborto involuntario. Durante la lactancia se debe evitar porque no hay suficiente información para conocer con exactitud si es segura para tu bebé.

La lección de la Mariposa


Un día, una pequeña abertura apareció en un capullo. Un hombre se sentó junto a él y observó durante varias horas cómo la mariposa se esforzaba tratando de que su cuerpo pasase a través de aquel pequeño agujero.


Le pareció que ella sola ya no lograría ningún progreso. Parecía que había hecho todo lo que podía, pero no conseguí agrandarlo.

Entonces el hombre decidió ayudar a la mariposa: tomó unas tijeras y cortó el resto del capullo.

La mariposa entonces, salió fácilmente. Pero su cuerpo estaba atrofiado, era pequeño y tenía las alas aplastadas.

El hombre continuó observándola porque él esperaba que, en cualquier momento, las alas se abrieran, y se agitaran, y serían capaces de soportar el cuerpo, que a su vez se iría fortaleciendo.

Pero nada de eso ocurrió.

La realidad es que la mariposa pasó el resto de su vida arrastrándose con un cuerpo deforme y unas alas atrofiadas. Nunca fue capaz de volar.

Lo que aquel hombre no comprendió, a pesar de su gentileza y su voluntad de ayudar, era que aquel capullo apretado que observaba aquel día, y el esfuerzo necesario para que la mariposa pasara a través de esa pequeña abertura, era el modo por el cual la naturaleza hacía que la salida de fluidos desde el cuerpo de la mariposa llegara a las alas, de manera que fuera capaz de volar una vez libre del capullo.

En su afán de ayudar, de evitar un esfuerzo, o un sufrimiento, la había dejado lisiada para toda la vida.

A veces en las cosas rutinarias nos pasa lo mismo, queremos ayudar y en su lugar entorpecemos...


miércoles, 29 de abril de 2015

El Mantel


El nuevo Sacerdote, recién asignado a su primer ministerio para reabrir una iglesia en los suburbios de Brooklyn, New York, llegó a comienzos de octubre entusiasmado con su primera oportunidad.

Cuando vio la iglesia se encontró con que estaba en pésimas condiciones y requería de mucho trabajo de reparación.  Se fijó la meta de tener todo listo a tiempo para oficiar su primer servicio en la Nochebuena.

Trabajó arduamente, reparando los bancos, empañetando las paredes, pintando, etc., y para el 18 de diciembre ya habían concluido con casi todos los trabajos, adelantándose a la meta trazada.

El 19 de diciembre cayó una terrible tempestad que azotó el área por dos días completos.

El día 21 el sacerdote fue a ver la iglesia. Su corazón se contrajo cuando vio que el agua se había filtrado a través del techo, causando que una área considerable de pañete, de unos 20 pies por 8 pies cayó de la pared frontal del santuario, exactamente detrás del pulpito, dejando un hueco que empezaba como a la altura de la cabeza.

El sacerdote limpió el desastre en el piso, y no sabiendo que mas hacer sino posponer el servicio de Nochebuena, salió para su casa.

En el camino notó que una tienda local estaba llevando a cabo una venta del tipo "mercado de pulgas", con fines caritativos, y decidió entrar.
Uno de los artículos era un hermoso mantel hecho a mano, color hueso,  con un trabajo exquisito de aplicaciones, bellos colores y una cruz bordada en el centro.

Era justamente el tamaño adecuado para cubrir el hueco en la pared frontal.

Lo compró y volvió atrás camino a la iglesia. 
Ya para ese entonces había comenzado a nevar. Una mujer mayor iba corriendo desde la dirección opuesta tratando de alcanzar el autobús, pero finalmente lo perdió. El sacerdote la invitó a esperar en la iglesia donde había calefacción, por el próximo autobús que tardaría 45 minutos mas en llegar.

La señora se sentó en el banco sin prestar atención al pastor mientras, este buscaba una escalera, ganchos, etc., para colocar el mantel como tapiz  en la pared. El sacerdote apenas podía creer lo hermoso que lucía y como cubría todo el área de problema.

Entonces el miró a la mujer que venía caminando hacia abajo, desde el pasillo del centro.
Su cara estaba blanca como una hoja de papel.

"Padre, ¿Donde consiguió ud. Ese mantel?

" El padre le explicó.

La mujer le pidió revisar la esquina inferior derecha para ver si las iniciales EGB aparecían bordadas allí.

Si estaban...

Estas eran las iniciales de la mujer y ella había hecho ese mantel 35 años atrás, en Austria.
La mujer apenas podía creerlo cuando el pastor le contó como acababa de obtener el mantel.

La mujer le explicó que antes de la guerra ella y su esposo tenían una posición económica holgada en Austria. Cuando los Nazis llegaron, la forzaron a irse. Su esposo debía seguirla la semana siguiente.

Ella fue capturada, enviada a prisión y nunca volvió a ver a su esposo ni su casa.

El pastor la llevó en el carro hasta su casa y ofreció regalarle el mantel, pero ella lo rechazó diciéndole que era lo menos que podía hacer.

Se sentía muy agradecida pues vivía al otro lado de Staten Island  y solamente estaba en Brooklyn por el día para un trabajo de limpieza  de una casa.

Que maravilloso fue el servicio de la Nochebuena! 

La iglesia estaba casi llena.

La música y el espíritu que reinaban eran increíbles.

Al final del servicio, el sacerdote despidió a todos en la puerta y muchos expresaron que volverían.

Un hombre mayor, que el pastor reconoció del vecindario, seguía sentado en uno de los bancos mirando hacia el frente, y el padre se preguntaba porque no se iba.

El hombre le preguntó donde había obtenido ese mantel que estaba en la pared del frente, porque era idéntico al que su esposa había hecho años atrás en Austria antes de la guerra y como podía haber dos manteles tan idénticos?

El le relató al padre como llegaron los Nazis y como el forzó a su esposa a irse, para la seguridad de ella, y como el estaba dispuesto a seguirla, pero había sido arrestado y enviado a prisión. Nunca volvió a ver a su esposa ni su hogar en todos aquellos 35 años.

El pastor le preguntó si le permitiría llevarlo con el a dar una vuelta.

Se dirigieron en el carro hacia Staten Island, hasta la misma casa donde el padre había llevado la mujer tres días atrás. 

El ayudó al hombre a subir los tres pisos de escalera que conducían al apartamento de la mujer, tocó en la puerta y presenció la mas bella reunión de Navidad que pudo haber imaginado.

Una historia real - ofrecida por el Padre Rob Reid, quien dice que Dios trabaja en forma silenciosa.

Le pedí a Dios bendecirte cuando oraba hoy, para guiarte y protegerte según vayas por tu camino... Su amor está siempre contigo, por eso, cuando el camino que estés cruzando parezca difícil en extremo encomiéndaselo a Dios, y El hará el resto.

Las casualidades no existen, hay una razón, que sólo conoce Dios, por la cual te hago llegar este mensaje.

Sean bendecidos por Dios...


Anónimo

El collar azul turquesa


El dueño de la joyería estaba tras el mostrador mirando distraídamente la calle. La puerta se abrió y entró en la tienda una niñita que se acercó y apretó su cara contra el vidrio de la vitrina donde estaban expuestas diversas joyas y collares.
Sus ojos brillaron al ver un determinado objeto.
– ¿Me puede enseñar el collar azul, por favor?, le preguntó al joyero.
– ¿El collar de turquesas?, dijo éste.
– Sí, señor, ese mismo. Es para mi hermana. ¿Me podría hacer un paquete bien bonito?
– ¿Cuánto dinero tienes, niña?, le preguntó el hombre.
Sin dudarlo ella sacó del bolsillo de su ropa, un pañuelo todo atadito y fue deshaciendo los nudos. Colocó el contenido de monedas encima del mostrador y dijo feliz:
– ¿Verdad que es bastante? Son todos mis ahorros. Quiero hacer un regalo muy especial a mi hermana porque desde que mi madre murió ella cuida de mí y de mis hermanos y nunca se queja. Este collar tiene el color de sus ojos.
El joyero cogió el collar delicadamente, lo puso en una cajita y lo envolvió con gusto haciendo un hermoso lazo para acabar su paquete.
– Toma niña. Llévalo con cuidado y que tu hermana sea muy feliz.
La niña se fue contenta, saltando calle abajo. Aún no había acabado el día cuando una linda jovencita de cabellos rizados y unos bonitos ojos azules, entró en la tienda . Colocó sobre el mostrador la caja con el collar de turquesas y preguntó:
– ¿Este collar fue comprado aquí?
– Sí, señorita.
– ¿Me puede decir cuánto costó?
– Ah, señorita”, repuso el joyero, “el precio de cualquier producto de mi tienda es un tema confidencial entre vendedor y cliente.
– Pero señor”, continuó la joven, “mi hermana no tenía dinero para comprar este collar. Porque este collar es verdadero ¿verdad?
El hombre tomó el estuche y lo envolvió de nuevo, con sumo cuidado, devolviéndolo a la joven:
– Señorita, – dijo – su hermanita pagó por el collar el precio más alto que cualquier persona puede pagar: dio todo lo que tenía.
El silencio llenó la pequeña tienda y dos lágrimas rodaron por la cara emocionada de la joven, a la vez que una sonrisa iluminaba su rostro. Dando las gracias, sus manos tomaron el paquete con el collar por el que su hermana había dado todo lo que tenía.

Primera Clase


En un vuelo aéreo entre Johanesburgo y Londres, una señora blanca de unos cincuenta años que está sentada al lado de un hombre de color llama a la azafata para quejarse:


- ¿Cuál es el problema, señora? - Pregunta la azafata.


- ¿Pero no lo ve? - Responde la señora:


Me colocó al lado de un negro. No puedo quedarme al lado de estos ‘inmundos’. Deme otro asiento.


- Por favor, cálmese- Dice la azafata 


- Casi todos los lugares de este vuelo están ocupados. Voy a ver si hay algún lugar en clase ejecutiva o en primera. 


La azafata se apura y vuelve unos minutos después.


- Señora - explica la azafata - como yo sospechaba, no hay ningún lugar vacío en clase económica. He hablado con el comandante y me ha confirmado que tampoco hay lugar en ejecutiva. Pero sí tenemos un sitio libre en primera clase. Antes de que la señora pueda responder algo, la azafata continúa:


- Es totalmente inusitado que la compañía conceda un asiento de primera clase a alguien que está en clase económica, pero, dadas las circunstancias, el comandante consideró que sería escandaloso que alguien sea obligado a sentarse al lado de una persona tan indeseable...


Y, diciendo eso, la azafata mira al negro y dice:


- Si el señor me hiciera el favor de tomar sus pertenencias, el asiento de primera clase ya está preparado.


Todos los pasajeros de alrededor, que presenciaron la escena, se levantaron aplaudiendo por la actitud de la compañía.



lunes, 27 de abril de 2015

Hermanos




Dos hermanos, uno soltero y otro casado, poseían una granja cuyo fértil suelo producía abundante grano, que ellos se repartían a partes iguales.

Al principio todo iba perfectamente. Pero llegó un momento en que el hermano casado empezó a despertarse sobresaltado todas las noches, pensando: "No es justo. Mi hermano no está casado y se lleva la mitad de la cosecha; pero yo tengo mujer y cinco hijos, de modo que en mi ancianidad tendré todo cuanto necesite.

¿Quién cuidará de mi pobre hermano cuando sea viejo?

Necesita ahorrar para el futuro más de lo que actualmente ahorra, porque su necesidad es evidentemente, mayor que la mía.

Entonces se levantaba de la cama, acudía sigilosamente adonde su hermano y vertía en el granero de éste un saco de grano.

También el hermano soltero comenzó a despertarse por las noches y a decirse a sí mismo:

-Esto es una injusticia. Mi hermano tiene mujer y cinco hijos y se lleva la mitad de la cosecha. Pero yo no tengo que mantener a nadie más que a mí mismo. 

Es justo, acaso, que mi pobre hermano cuya necesidad es mayor que la mía, reciba lo mismo que yo?

Entonces se levantaba de la cama y llevaba un saco de grano al granero del hermano.

Un día, se levantaron de la cama al mismo tiempo y tropezaron uno con otro, cada cual con un saco de grano en la espalda.


Muchos años más tarde, cuando ya habían muerto los dos, el hecho se divulgó. Y cuando los ciudadanos decidieron erigir un templo, escogieron para ello el lugar en el que ambos hermanos se habían encontrado, porque no creían que hubiera en toda la ciudad un lugar más santo que aquel.

Anónimo